Cada vez es más frecuente que las personas que quieren comprar una vivienda soliciten el certificado de eficiencia energética para saber cuál es la “calidad energética” del inmueble.
En la legislación española existen varias normas que regulan el mercado de la vivienda en aspectos relacionados con la calidad energética de la edificación, que se pueden consultar en caso de duda:
Fuente: Guía de la Energía (IDAE)
¿Qué debe exigir el consumidor?
Lo que debe tener claro el consumidor es que está en su perfecto derecho de solicitar:
- Certificado de eficiencia energética. Desde junio de 2013 es obligatorio que las viviendas destinadas a la venta o al alquiler dispongan del Certificado de Eficiencia Energética, a fin de que el futuro inquilino o comprador sepa cuál es el comportamiento energético del inmueble. Hay que tener en cuenta que una vivienda poco eficiente estará lastrada por un gasto excesivo de energía y dinero.
- Memoria de calidades (si se trata de nueva construcción)
La Ley General para la Defensa de Consumidores y Usuarios (RDL 1/2007) permite al comprador de una vivienda de nueva construcción exigir al vendedor una “Memoria de Calidades” en el que se pueda consultar la siguiente información:- Aislamiento acústico y térmico que se ha empleado.
- Espesor, en centímetros, de aislamiento térmico que tiene el edificio.
- Tipos de ventanas y acristalamientos.
- Descripción de las instalaciones de calefacción y agua caliente.
- Especificación de la regulación automática prevista para dichas instalaciones de calefacción y agua caliente.
- Número y potencia de las calderas.
- Volumen de acumulación de agua caliente.
Antes de decidirse a comprar ¿qué es conveniente saber?
Existen una serie de factores que son fácilmente reconocibles y que ‘dan pistas’ sobre la buena calidad energética de los edificios:
- Mejor un diseño bioclimático. Se pueden lograr ahorros de hasta el 70% en edificios diseñados teniendo en cuenta las condiciones climáticas de la zona, que aprovechan los recursos disponibles (sol, vegetación, lluvia, vientos) para disminuir los impactos ambientales.
- Energía solar para la producción de agua caliente sanitaria (ACS). Los equipos para aprovechamiento térmico de la energía solar constituyen un desarrollo tecnológico fiable y rentable para la producción de agua caliente sanitaria en el sector de las viviendas.
- Calderas de biomasa para sustituir al carbón. Muchas comunidades que utilizaban carbón en el pasado han decidido cambiar a la biomasa para satisfacer las necesidades térmicas del edificio. De ese modo se logra una mayor eficiencia energética y se reducen las emisiones de CO2 a la atmósfera.
- Aprovechar el calor de que genera la tierra. La geotermia es otra de las fuentes de energía renovables que ya se ha implementado en algunas viviendas para satisfacer las necesidades energéticas del edificio. Consiste en utilizar un sistema de captación y una bomba de calor geotérmica que, en invierno, extrae el calor interior de la tierra para la calefacción y el agua caliente. En verano, ese calor es extraído transfiriéndolo al subsuelo y refrigera el edificio.
Fuente: IDAE