¡Todavía queda mucho verano! Y desde Remica queremos acercarte estos consejos que nos proporciona el IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) para ahorrar energía en la época estival.
Somos conscientes de que, con pequeños cambios, podemos reducir el consumo sin renunciar al confort. Apunta estos tips:
- Una temperatura de 27ºC con ropa adecuada, es suficiente para mantener el confort de una vivienda.
- Ventilar las viviendas minimizando el impacto en la refrigeración. En verano conviene abrir las ventanas por la noche o a primera hora de la mañana para aprovechar las horas más frescas.
- Bajar toldos y cerrar persianas son hábitos eficaces para reducir el calentamiento de nuestra vivienda.
- Cuando enciendas el aparato de aire acondicionado, no ajustes el termostato a una temperatura más baja de lo normal (no menos de 27º): no enfriará la casa más rápido y el enfriamiento podría resultar excesivo y, por tanto, un gasto innecesario.
- El mantenimiento del sistema de aire acondicionado es fundamental si queremos que nuestro equipo funcione de forma adecuada y eficiente. Si nota que su equipo empieza a proporcionarle menos frío puede ser síntoma de una avería o una fuga de refrigerante.
- Las revisiones periódicas pueden ahorrar energía y aumentan la vida de nuestro sistema de refrigeración.
- Apaga las luces y los equipos electrónicos cuando no los estés utilizando. Además, si sales de la habitación, asegúrate de apagar el aire acondicionado.
- Reutiliza tus toallas y ropa de cama durante tu estancia en el lugar de vacaciones, si no necesitas un cambio diario.
Recuerda que cada pequeño gesto cuenta y tenemos muchas oportunidades para adoptar prácticas sostenibles y contribuir al ahorro de energía. La temperatura adecuada, la ventilación estratégica, el cuidado de las persianas y el uso consciente del aire acondicionado son pasos que marcan la diferencia. ¡Disfruta de tu verano con conciencia energética!