El hospital de campaña de IFEMA se ha convertido en un símbolo de lucha y de resiliencia para luchar contra el COVID-19.
Muchas personas y organizaciones han unido esfuerzos para transformar la Feria de Madrid en un hospital. Y se ha logrado en menos de una semana gracias a la colaboración de colectivos que solo en contadas ocasiones colaboran, como bomberos, militares, sanitarios, fontaneros …
A Remica, la petición de colaborar en este proyecto llegó a través de dos departamentos distintos, el Área de Grandes Clientes y el Centro de Planificación Operativa, que en seguida empezaron a coordinar los medios materiales y personas disponibles.
En total, 16 efectivos del personal técnico de Remica, principalmente soldadores de cobre con varilla y fontaneros, se desplazaron a trabajar en el Hospital de IFEMA.
Redes de tuberías para gases medicinales
El equipo está habituado a trabajar en infraestructuras como hoteles y alojamientos turísticos, donde es necesario realizar las actuaciones mientras el edificio continúa ocupado y funcionando.
En solo una semana, el hospital ha sido una realidad. El personal de Remica desplazado a IFEMA ha colaborado para construir las tuberías que forman el sistema de distribución de gases medicinales.
Estas tuberías ayudan a distribuir el oxígeno, el aire medicinal y vacío, a todas las camas que se han montado en los pabellones 7 y 9.
Para ello, han colocado y soldado tuberías de cobre, y también tuberías de PVC.
El tiempo, una variable fundamental a tener en cuenta
El tiempo era crucial para que los pabellones donde trabajaba el equipo de Remica pudieran estar listos a tiempo. Por ello, no solo ha habido que trabajar largas jornadas, que incluso a veces se han alargado hasta la noche, sino que también se ha prestado asistencia de forma puntual al montaje de las camas.
No obstante, y a pesar de la presión, nuestros compañeros destacan el buen ambiente que se ha vivido entre todas las personas y organizaciones que han acudido a colaborar en el hospital de IFEMA, convertido en un auténtico símbolo de solidaridad frente al COVID-19.
La clave para organizar el trabajo ha sido una buena coordinación. Los responsables de cada equipo allí desplazado mantenían reuniones regulares y, posteriormente, cada uno se encargaba de organizar las tareas en su grupo de trabajo.
Suministro de materiales
Otro de los aspectos clave del proyecto ha sido el suministro de material, que en ocasiones ha sufrido algún retraso. En esta tarea, también participó el personal de Remica. Se suministraron botellas de oxígeno y acetileno, instalaciones de redes de cobre y de PVC, soldadura en cobre…
En este sentido, ha sido importante la contribución del Centro de Planificación Operativa de la Compañía que “ha hecho lo imposible para conseguir alguno de los materiales en un tiempo récord”.
Orgullosos de nuestro equipo
En Remica somos conscientes del compromiso de todos los compañeros que han participado en este proyecto, que han estado dando lo mejor de ellos mismos en cada momento.
Ha sido un esfuerzo muy grande e intenso por su parte, un auténtico ejemplo que nos ha llenado de orgullo al resto del equipo. ¡Gracias!