¿Cuál es la situación de la eficiencia energética en el mundo? Resulta difícil creer que, a nivel global, un 98% de la energía se desperdicia. Sin embargo, así es a tenor de los datos recogidos en el informe ‘Índice de Prosperidad Económica y Productividad Energética de 2015’. Según los autores del documento, el bajo nivel de eficiencia energética en diversos sectores (residencial, industrial, transporte…) es lo que genera este gran despilfarro energético. Consideran que, si tan solo se lograra duplicar la tasa de productividad energética, pasando del 1,5% actual al 3%, el gasto en combustibles fósiles disminuiría en más de dos billones de euros anuales.
Para que este cambio se materialice, deben ser las mayores economías del mundo, Estados Unidos, Rusia, China, Japón, La India y La Unión Europea, quienes representan el 60% del producto interior bruto mundial y el 65% de la demanda de energía, los que deben realizar un mayor esfuerzo. Y apuntan a la necesidad de que al más alto nivel se alcancen compromisos que se acaben materializando en una disminución del despilfarro energético.
Pero, a pesar de que a priori estos datos puedan parecer negativos, también tienen una lectura positiva ya que el informe refleja el gran potencial que tienen las naciones para impulsar el desarrollo social, medioambiental y económico mediante la mejora de la producción de energía y la optimización de la eficiencia energética en los puntos de consumo.
Respecto a la Unión Europea, algunos de los datos más llamativos son:
- Europa podría doblar su índice anual de productividad energética del 1,5% al 3% para el año 2030, adoptando tecnologías energéticamente eficientes en construcción, agricultura, transporte e industria.
- Además, que la UE pusiera empeño en mejorar en eficiencia energética supondría la creación de 1,2 millones de empleos en cinco años, un aumento del 1,1% del PIB y una reducción del consumo energético de un 35%.
El informe señala la gran importancia de la iluminación LED en el desarrollo económico de los países, ya que gracias a ella se puede mejorar la eficiencia energética de un hogar medio en un 500%.
Igualmente, dispositivos de ahorro energético (smart meters) o la mejora del aislamiento de los hogares, podría contribuir a reducir sustancialmente las facturas energéticas en los edificios de viviendas.
Eficiencia energética de España
El pasado mes de julio, la directora Ejecutiva de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), Maria Van Der Hoeven, presentaba en Madrid junto con el ministro de Industria, Energía y Turismo, el informe “Energy Policies of IEA Countries – Spain 2015 Review”, un documento en el que la AIE refleja sus conclusiones tras analizar las políticas energéticas de los estados de la UE.
Entre las principales conclusiones destaca que aunque España mantenga una elevada dependencia de las importaciones energéticas (dichas importaciones representan un 70% de la demanda) resulta positivo que esta dependencia haya disminuido desde 2009, fecha del anterior test, que mostraba una dependencia energética exterior del 80%.
El informe también ofrece una serie de recomendaciones para que España realice una estrategia de eficiencia energética a largo plazo que contribuya a conseguir los objetivos de energía y clima fijados por la Unión Europea para 2030. Por ello, la AIE ha alabado la creación de un Fondo Nacional de Eficiencia Energética.
En el capítulo de ayudas de ahorro y eficiencia energética puestas en marcha por el Ministerio de Industria para 2015, destacan las que se ofrecen a través del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDAE). A través de este programa se destinan 168 millones de euros procedentes del Fondo Nacional de Eficiencia Energética para cuatro líneas de actuación:
- Rehabilitación energética de edificios
- Transporte
- Pequeñas y medianas empresas y gran empresa del sector industrial
- Alumbrado exterior
Se estima que estos programas lograrán ahorros de unos 131 ktep anuales, que es el consumo energético que realizan 150.000 familias.
Sin embargo, las ayudas no serán efectivas si no se logra inculcar en las personas la necesidad de que todos nos impliquemos en adoptar hábitos de consumo energético eficientes. Por ello, de forma paralela a la publicación de las ayudas, desde la Administración se ha puesto en marcha la campaña informativa “Controlas tu energía”, con información de interés sobre certificados de eficiencia energética, ayudas a la rehabilitación, conducción eficiente o la factura eléctrica.