Que España es uno de los países de la Unión Europea con más dependencia energética del exterior es un hecho. Una situación que perjudica al país tanto económica como energéticamente y que se deja notar en el bolsillo del consumidor. Revertir esta situación no es imposible, aunque la receta incluiría un doble objetivo: aumentar la eficiencia y el ahorro de energía y apoyar la producción de fuentes de energía autóctonas, especialmente las renovables.
En lo que respecta a la mejora del ahorro de energía y de la eficiencia energética, existe un amplio margen de mejora en las instalaciones térmicas de los edificios. Después de la renovación de los sistemas de calefacción/refrigeración ineficientes y de la rehabilitación de los edificios para mejorar el aislamiento térmico, hacer un consumo responsable es la mejor manera de evitar el derroche energético.
Gracias a las nuevas tecnologías, esto se puede conseguir gracias a la telegestión: un sistema que permite monitorizar a distancia el consumo energético de las instalaciones, lo que tiene múltiples beneficios.
Permite detectar anomalías con rapidez y adelantarse a los problemas
Gracias a la telegestión, los técnicos encargados del mantenimiento de la instalación térmica reciben un aviso cuando se produce alguna incidencia. Incluso, dependiendo de la configuración del sistema de telegestión, pueden modificar a distancia algunos de los parámetros de la instalación hasta alcanzar los parámetros deseados.
Imaginemos, por ejemplo, que se ha producido una avería en un depósito de agua caliente de mil litros. En una instalación que no esté telegestionada lo más probable es que este problema no se detecte hasta que los usuarios se quedaran sin agua caliente y avisaran a su mantenedor. Gracias a la telegestión, en cambio, se puede intervenir antes de que las personas detecten el problema.
En el caso de Remica, nuestro servicio de mantenimiento incluye un servicio de telegestión 24 horas gratuito para todos los clientes. El único requisito necesario para poder beneficiarse de este servicio es que la instalación térmica cuente con una centralita de control telegestionable y una línea de teléfono.
Hace que sea posible monitorizar las instalaciones las 24 horas del día
La telegestión permite mantener las instalaciones monitorizadas las 24 horas del día, los 365 días del año. Claro que para aprovechar todo el potencial de este sistema conviene que la compañía con la que se contrata el servicio de mantenimiento preventivo y correctivo 24 h. cuente con personal disponible para responder en cuanto se detecte cualquier tipo de incidencia en la instalación.
Y es que, aunque el servicio de telegestión permite realizar algunas actuaciones a distancia, en ocasiones es necesario que se desplace un técnico de mantenimiento a la instalación para que realice los ajustes pertinentes.
Precisamente, lo que distingue el servicio de mantenimiento y el servicio de telegestión de Remica es que las 24 horas al día, los 365 días del año existe un servicio técnico capaz de atender las alarmas y desplazarse a la instalación si fuera necesario.
Además, gracias a la política de atención por zonas de nuestra compañía, contamos con una ágil capacidad de respuesta. Así, por ejemplo, dado que en Madrid una de cada tres instalaciones térmicas centralizadas del sector residencial confía en nuestra compañía para su servicio de mantenimiento, asignamos un técnico por zona. De modo que, ante cualquier imprevisto, el técnico puede acudir a la instalación con rapidez.
La telegestión es un aliado imprescindible de la gestión energética
Además de un mantenimiento preventivo y correctivo solvente, que asegure un buen funcionamiento para evitar el derroche energético, también es necesario optimizar el rendimiento de la instalación térmica. Esto significa adoptar medidas de ahorro y eficiencia energética para obtener el máximo confort al tiempo que se consigue un ahorro de energía.
La experiencia acumulada en miles de instalaciones nos ha permitido comprobar que aplicar medidas de ahorro y eficiencia energética en las instalaciones térmicas puede generar ahorros de hasta el 30 por ciento de gasto en combustible; algo muy importante ya que la mayor partida presupuestaria en los gastos de la calefacción comunitaria se destina a ello.
“El sistema de telegestión nos avisa de los fallos que generan ineficiencias energéticas; aquellas que el cliente no percibe por no interrumpirse el servicio. Sin embargo, el rendimiento de la instalación va disminuyendo”, explican desde Remica Servicios Energéticos. Si no se controla, esto puede derivar en un mayor consumo del combustible que el necesario para que los usuarios gocen del confort que necesitan en sus hogares.