¿Sabes que con un mal aislamiento térmico tu edificio puede estar perdiendo energía a través de la fachada, ventanas, puertas, tejado, etc.?
La rehabilitación energética de la fachada de un edificio para mejorar el aislamiento térmico supone múltiples ventajas para sus propietarios, ya que permite revalorizar el inmueble, aumentar el confort de las viviendas y reducir las facturas energéticas.
1. Se recupera la inversión realizada en la rehabilitación energética
El coste que supone mejorar el aislamiento térmico del edificio se recupera en el ahorro de las facturas de energía. Se estima que una rehabilitación térmica media se puede amortizar en un plazo de cinco a siete años y, considerando la larga vida media del aislamiento, en este periodo se podrá ahorrar en la factura energética hasta nueve veces más de lo que costó la rehabilitación.
2. Los edificios se vuelven más confortables y ecológicos
Los edificios mal aislados térmicamente dejan escapar el calor en invierno y son más difíciles de refrigerar durante los días calurosos de verano. En cambio, los inmuebles con un buen aislamiento o que han sido rehabilitados energéticamente hacen que sus usuarios tengan una sensación de confort agradable.
Además de aumentar el nivel de confort de las personas, los edificios se vuelven más sostenibles ya que se evitan las pérdidas de energía que sufren las construcciones mal aisladas, donde es necesario destinar más energía a su refrigeración en verano y a calentarlos en invierno.
3. Los inmuebles se revalorizan
Las viviendas y oficinas con un mejor aislamiento térmico aumentan su valor debido a que son térmicamente más confortables, disponen habitualmente de una mejor calificación energética y el gasto que requieren en energía es menor. Además, con un buen aislamiento también se puede reducir el ruido procedente del exterior o de otras estancias del edificio.
4. Existen múltiples opciones para mejorar el aislamiento térmico
En el caso de las viviendas, si fueron construidas antes de 1980, es probable que no tengan ninguna protección térmica. Si se encuentra en uno de estos edificios ¡no tema! Hay múltiples soluciones que se pueden aplicar para solventar esta situación. Las soluciones de aislamiento pueden realizarse tanto por la parte interior como porla parte exterior del edificio o por inyección en los muro.
Lo más conveniente es contar con el asesoramiento de un gestor energético que ofrezca la solución que mejor se adapte para cada caso, ya que la inversión que se haya de realizar debe responder a las características de cada inmueble y a los objetivos de ahorro energético que se desean conseguir.
5. Se pueden aprovechar otras reformas
Las reformas suelen ser un tema delicado para cualquier propietario o inquilino de un inmueble. La buena noticia es que la rehabilitación energética para mejorar el aislamiento térmico puede realizarse aprovechando otras reformas que se vayan a poner en marcha.
Dado que uno de los mayores costes de este tipo de actuaciones suele ser la mano de obra, si se realizan las reformas programadas combinadas con actuaciones de mejora del aislamiento térmico el ahorro económico puede ser significativo.
¿A qué tipo de actuaciones nos referimos?
- Reparación de goteras y humedades del edificio, obras de limpieza y mejora de la fachada… se pueden aprovechar para mejorar el aislamiento de todo el edificio.
- En las viviendas y oficinas, hay pequeñas reformas que también pueden contribuir a mejorar el aislamiento, entre ellas, sustituir las viejas ventanas por otras de doble cristal; al cambiar las tuberías de agua caliente aislarlas correctamente; mejorar el aislamiento del suelo al cambiar el pavimento, etc.
Asesoramos para mejorar el aislamiento térmico
Como empresa de servicios energéticos, en Remica también realizamos un estudio personalizado del estado de la envolvente de su edificio y le proponemos la solución más adecuada para que deje de desperdiciar energía. ¿A qué espera? Contacte con un consultor energético de Remica remica@remica.es y le asesoraremos sobre la mejor solución de aislamiento térmico del edificio.
Sabías que…
- Por ley, desde el mes de octubre de 2006, es obligatorio aislar los edificios existentes por encima de unos mínimos cuando haya modificaciones, reformas o rehabilitaciones que afecten a más del 25% del total de los cerramientos de un edificio que cuente con una superficie útil superior a 1.000 metros cuadrados.
- Aparte de lo establecido por la ley, para cualquier edificio de más de 20 años o insuficientemente aislado, se estima aconsejable una rehabilitación térmica con la que podría alcanzarse, fácilmente, un ahorro del 50% de la energía consumida en calefacción y/o refrigeración.