La decisión de dónde instalar un radiador en una vivienda suele provocar dudas. ¿Debe ubicarse debajo de una ventana? ¿Hay que poner más de un radiador en la habitación? Ubicar bien los radiadores es uno de los aspectos muy importantes a la hora de garantizar aprovechar todo su potencial.
Instalar el radiador bajo la ventana
La ubicación ideal es bajo la ventana de forma que el aire frío se caliente al pasar sobre el radiador.
La razón es la siguiente: el aire caliente tiende a subir empujando el aire frío de la zona superior hacia abajo, creándose una convección cíclica que reparte el calor de forma rápida y homogénea.
Según la guía publicada por la Comunidad de Madrid dirigida a ofrecer las claves de optimización de las instalaciones de calefacción individuales, la ubicación bajo la ventana permite:
- Ahorrar hasta un 5% de energía
- Ganancias de hasta 0,5ºC en la temperatura ambiente
- Mayor confort debido a una mejor distribución de la temperatura.
¿Qué hacer si el radiador no se puede colocar bajo la ventana?
Si por el motivo que fuera, el radiador no pudiese ubicarse bajo la ventana, se debería colocar lo más cerca posible de ella.
Medidas complementarias
Aparte de la buena localización de los radiadores, conviene tener en cuenta que existen algunas soluciones sencillas para reducir las pérdidas de calor que se puedan producir en la fachada.
Entre ellas se encuentra la de instalar una lámina reflectante que refleje la radiación hacia el interior, o pintar la superficie detrás del radiador con temperatura termorreflectante.
Otro aspecto fundamental a tener en cuenta es la necesidad de incorporar válvulas termostáticas a los radidadoes, de manera que puedan ajustar la temperatura de cada estancia en función de las necesidades térmicas de cada estancia. Esta medida puede llegar a generar ahorros de entre el 10 y 15%.
Confía en profesionales cualificados
Para la instalación de radiadores y la instalación de válvulas termostáticas, confía siempre en instaladores cualificados.
