El derroche de energía se puede evitar en el día a día cambiando algunos hábitos adquiridos con el paso del tiempo. ¡Realiza pequeños gestos y consigue ahorrar energía! De ese modo lograrás reducir tu factura energética y aportarás tu granito de arena para reducir las emisiones de gases contaminantes a la atmósfera.
¿Qué, cómo y cuándo se produce el derroche de energía?
Tu hogar es tu refugio, el lugar al que regresas al final del día y en el que probablemente pasas más horas. Por ello lograr que sea confortable es una prioridad para ti. ¿Sabías que con estos sencillos consejos no solo evitarás el derroche de energía, sino que lograrás incrementar la comodidad de tu hogar? ¡Tu factura energética se reducirá como por arte de magia!
- ¿Buscas piso? ¡Decídete por el que sea energéticamente más eficiente! Tanto si estás buscando una casa de compra o de alquiler, fíjate en la etiqueta energética del inmueble. Igual que los electrodomésticos, están clasificadas con una escala de letras (desde A para las más eficientes a G para las menos eficientes). Pregunta a quien te muestre la casa por su nivel de eficiencia energética, si tiene un buen aislamiento, si dispone de buenas ventanas, qué tipo de sistema de calefacción/climatización tiene… En las casas energéticamente más eficientes tus facturas de energía serán menores ¡Verás cómo se nota a final de mes, especialmente en los días de más frío o de más calor”.
- Hágase la luz (de bajo consumo). En una vivienda, el consumo en iluminación puede llegar a suponer hasta el 20% de la factura de la luz. Por lo tanto evitar el derroche energético es fundamental ¿La solución? Cambia las bombillas incandescentes por otras de bajo consumo y lámparas eficientes. No solo necesitan menos electricidad ¡También tienden a durar más! Además, aprovecha todo lo que puedas la luz natural y, si ya ha anochecido o está el día muy oscuro, no te olvides de apagar las luces en aquellas habitaciones que permanezcan vacías.
- ¿Necesitas electrodomésticos nuevos? ¡Decídete por los de mayor eficiencia energética! La mayoría de los equipos domésticos disponen de una etiqueta energética que permite elegir los más eficientes. Quizá cuesten un poco más pero, a la larga, el ahorro que proporcionan merece la pena ya que consumen menos energía, por lo que se acaba amortizando la inversión.
- Las plantas ayudan a regular la temperatura de tu hogar. ¿Te has preguntado por qué alrededor de los edificios de viviendas a menudo se plantan árboles? La respuesta quizá te sorprenda: colocar vegetación en el exterior del edificio evita que el sol incida de forma directa en los edificios, lo que constituye una medida de protección solar muy útil. En el interior de las viviendas, las plantas no solo cumplen una función decorativa sino que también son útiles ya que son un regulador natural de temperatura, además de un humidificador biológico. Con tal de equilibrar su nivel de humedad, serán capaces de refrescar el ambiente, por lo que tienden a disminuir la temperatura ambiente.
- ¿Sabes que el agua caliente consume mucha energía? Después de la calefacción el agua caliente es el segundo elemento que consume más energía en el hogar y puede llegar a suponer hasta el 30% de nuestra factura. Ahorrar agua es posible usando dispositivos que se acoplan a la grifería existente como aireadores, perlizadores, reductores de caudal de duchas, etc. ¡Notarás la diferencia en la factura y en la cantidad de litros consumidos, pero en nada más!
- Prestar atención a los pequeños detalles merece la pena. Los grifos que gotean 24 horas pueden llegar a desperdiciar hasta 30 litros de agua; lo que equivale a más de la mitad de agua que necesita una persona a diario para cubrir sus necesidades básicas según la OMS. Otro pequeño detalle que provoca el derroche energético en el hogar son las luces rojas de encendido de los electrodomésticos como televisores (también conocidos como stand by) y los aparatos que permanecen enchufados (ej. lámparas, cargadores de móvil…) para ser usados en cualquier momento. Estos dispositivos realizan lo que se denomina consumo fantasma de energía y se calcula que pueden generar un gasto energético de hasta 58 euros anuales.
- ¿Te metes en obras? Interésate por cómo mejorar la eficiencia energética de tu hogar. Si en tu inmueble os disponéis a acometer una reforma, es un buen momento para aprovechar la situación y mejorar el aislamiento térmico del edificio. Los costes serán menores que si realizáis una reforma expresamente para mejorar el aislamiento. Notaréis un mejor confort y un mayor ahorro de la factura energética ya que en invierno no se escapará el calor de las viviendas y en verano no se calentarán.
¿Qué te han parecido nuestros consejos? ¿Hay alguno más que utilizas y que te gustaría compartir? ¡Déjanos tu comentario!


