Reduce el estrés, potencia la motivación, estimula la creatividad… el sentido del humor puede que no sea lo que esté mejor visto en el trabajo, pero lo cierto es que según los expertos cuenta con numerosos beneficios tanto para el empleado como para la empresa. Así que si quieres tomarte en serio tu trabajo, comienza por mirarlo con una sonrisa.
De hecho, desde hace un tiempo, los departamentos de RRHH de varias empresas en EEUU vienen midiendo no sólo el IQ o coeficiente intelectual de sus empleados, sino también el FQ o coeficiente humorístico. La razón de esta nueva medición no es otra que aumentar la productividad de la empresa, ya que según los estudios realizados, las condiciones de diversión aumentan el rendimiento de los trabajadores.
Según el psicólogo Eduardo Jáuregui, trabajar con sentido del humor “fortalece la motivación individual y colectiva, estimula la innovación y optimiza la comunicación interna”. No es el único en hacer esta afirmación. Numerosos estudios muestran que disfrutar de un vídeo cómico o de un juego divertido ayuda a reducir el estrés en los individuos. Si aplicamos esto al entorno laboral, teniendo en cuenta el efecto negativo que éste genera en el puesto de trabajo deteriorando la salud mental y física de los empleados, parece obvio que aderezar con unas dosis de humor nuestro día a día puede ser un importante factor para mejorar el clima laboral.
Dicen los expertos que, de media, nos reímos 15 veces al día, sin embargo, aquellas personas que son capaces de reír más a menudo y tienen buen humor cuentan con un gran antídoto para la angustia y las preocupaciones ya que nos hace tomar distancia de los problemas ofreciéndonos otro punto de vista.
Además, por raro que nos pueda parecer, una buena carcajada puede ayudarnos en muchos casos a favorecer la innovación empresarial. Así, pese a que todavía no se ha profundizado en las causas, sí existen numerosos estudios psicológicos que demuestran que el humor facilita la flexibilidad mental y la capacidad para innovar.
Por otro lado, es cierto que los ascensos, la retribución, la formación, los beneficios sociales de las empresas… suponen un elemento motivacional; sin embargo, el humor ejerce un papel igualmente importante en el empleado ya que se trata de un motivador natural.
El humor es también una forma de atraer y retener el talento en la empresa, fomentar la comunicación interna y unir al equipo de trabajo. Y es que, un ambiente alegre resultará más atractivo para cualquier profesional, que tendrá una imagen interna de la empresa más favorable y se mostrará más abierto a expresar su opinión y a recibir la de los demás.
Asimismo, el humor nos puede ayudar en el proceso de aprendizaje, esto porque, el juego y la capacidad para reírse de los fracasos son fundamentales. Un curso de formación que incluye elementos divertidos en los puntos claves aumenta la probabilidad de que sus asistentes recuerden la información en el futuro.
De este modo, dotar de un poco de humor al puesto de trabajo puede ser muy positivo, no sólo a nivel interno, sino también de cara a nuestros clientes. Y es que, es probable que cualquier empleado entre estar tumbado en la playa o estar sentado frente al ordenador en la oficina prefiera la primera opción (algún raro habrá que no…), pero lo cierto es que si por lo menos conseguimos convertir la oficina en un lugar alegre y divertido habremos mejorado en gran parte de nuestras vidas.
Aquí va una ayudita…
Sentido del humor: beneficios a largo plazo
Más allá de los beneficios laborales del sentido del humor, lo cierto es que tomarse la vida con una sonrisa genera beneficios para la salud de las personas. Así opina Natalia López Moratalla, catedrática de Bioquímica y Biología molecular de la Universidad de Navarra (UNAV) quien, en declaraciones recogidas por Efesalud, manifestaba que “el sentido del humor no sólo nos alegra la existencia y hace más llevaderas las adversidades, sino que a largo plazo termina modificando nuestro cerebro de forma positiva, además de convertirse en un eficaz recurso para fortalecer el corazón y protegernos de algunas enfermedades”.
¿Cómo es posible? Durante la conferencia titulada Humor y cerebro feliz, Natalia López Moratalla destacaba que el sentido humorístico responde a un mecanismo cerebral que actualmente está siendo investigado por neurocientíficos. El mecanismo cerebral del humor es muy complejo e innato en el ser humano y “se expresa de igual forma en todas las culturas, en todas las edades. La risa significa alegría y felicidad universalmente y en todas las épocas”, explica.
Rodearse de personas que hacen reír mejora la convivencia, no solo porque estas personas hacen pasar buenos ratos sino porque, gracias a la risa, los malos momentos se relativizan, lo que además de influir en el estado de ánimo, también tiene efectos positivos en el organismo.
Según un estudio de la UNAV, “las personas que contrarrestan el estrés con el humor tienen un sistema inmunitario sano, padecen un 40 por ciento menos de infartos de miocardio o apoplejías, sufren menos dolores en los tratamientos dentales y viven cuatro años y medio más”.