Remica cuenta con más de 280 profesionales que trabajan cada día para ofrecer el máximo ahorro y confort a nuestros clientes. El perfil profesional de nuestros empleados es muy variado: técnicos, ingenieros, informáticos, administrativos… Pero todos ellos persiguen con su trabajo un fin común: dar el mejor servicio a nuestros usuarios. El departamento de Recursos Humanos es el encargado de atraer, retener y desarrollar el talento dentro de la empresa. Un trabajo del que, aseguran, se sienten “orgullosos”.
Un ejemplo claro de esa captación de talento es el caso de Juan Pedro L, experto en desarrollo, implantación y utilización de soluciones CAD (Diseño Asistido por ordenador) con 24 años de experiencia en esta área; llegó a Remica para impartir un curso de formación y gustó tanto su perfil que ¡se quedó!
Su despacho es una de esas “paradas obligatorias” cuando alguien visita nuestras oficinas y del que todo el mundo sale impresionado gracias a los diseños que realiza en 3D. Su trabajo es clave en la estandarización de equipos y procesos que lleva a cabo la compañía.
Juan Pedro en su puesto de trabajo
“Mi trabajo repercute directamente en el cliente porque permite obtener productos más fiables y precisos, con una reducción de tiempos en todo el proceso, desde su concepción hasta la fabricación. Es decir, al final el cliente obtiene plazos de ejecución de obra más cortos, instalaciones más ergonómicas y un exhaustivo control de calidad, de acuerdo a los estándares que Remica siempre ofrece”.
Precisamente, para Paloma M., asistente de la Dirección General Adjunta, uno de los grandes activos de Remica es la gran calidad técnica y humana de la compañía. La asistente lleva unos meses trabajando en esta empresa, pero cuenta con varios años a sus espaldas dentro del sector de las instalaciones y la eficiencia energética: “Aunque conocía la empresa y siempre me ha parecido una referencia, hasta que no empecé a trabajar aquí no fui consciente realmente del gran potencial que tiene esta compañía a todos los niveles, tanto tecnológicamente como a nivel humano. Creo que es algo de lo que sentirnos orgullosos y que hay que trabajar para hacérselo llegar al cliente final”.
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La relación con el cliente
Si eres cliente de Remica, seguramente más de una vez te hayas topado con alguno de nuestros técnicos, ellos son los encargados de que nuestras instalaciones se encuentren siempre a punto y de solventar cualquier incidencia que pueda surgir. “Nuestro trabajo es muy importante, somos el primer eslabón en la relación de Remica con el cliente. El usuario en muchas ocasiones identifica a Remica con nosotros ya que somos aquellos que llevamos a cabo las intervenciones y con los que interactúan directamente”, señala Javier M., técnico experto en climatización, que lleva más de 10 años en la compañía.
“Los técnicos conocen al detalle las instalaciones y son los que están más cerca del cliente”, afirma Silvia S., ingeniera técnica industrial, que trabaja en Telegestión de Remica desde 2012.
Este departamento es uno de las más llamativos de la compañía ya que cuenta con grandes pantallas que ofrecen datos actualizados de cada una de las instalaciones que tiene contratado el servicio de telegestión: “Mi trabajo repercute directamente en el cliente”, explica Silvia S. “Podemos anticiparnos en la detección de cualquier problema o anomalía en el funcionamiento de las instalaciones y actuar de inmediato para solucionarlo, incluso antes de que los vecinos del edificio se den cuenta de que algo no va bien. Con ello evitamos los inconvenientes que la falta de servicio de calefacción o agua caliente puede causar”.
En el caso de que nuestros usuarios necesiten comunicarse con Remica, una de las voces que les atenderá al otro lado del teléfono es la de Nuria L., del departamento de Calidad y Atención al cliente. En su día a día funciona como intermediaria entre las necesidades de los clientes y los diferentes departamentos de la compañía.
“En general la relación con los clientes es buena. Es normal que a veces la gente llame molesta por algún motivo, una cuestión que no entiende o algún error que hayamos podido cometer, pero en la mayor parte de los casos, una vez aclarada la duda o solucionado el problema, siempre me dan las gracias”, explica Nuria L. “Mi trabajo consiste en ponerme en su lugar y tratar de darles las mejores explicaciones y soluciones, y mi percepción es que el cliente valora ese esfuerzo”.
La labor de este departamento va más allá y además, realiza encuestas de satisfacción a los usuarios para que valoren los servicios de Remica, una información que resulta de gran utilidad.
“Es importante tener un trato cercano con los clientes y conocer sus opiniones, porque ello nos ayuda a mejorar”, explica Antonio O., Director Comercial de Remica. “Para mí el servicio al cliente es estar ahí cuando tu cliente te necesita. Esta filosofía, he de decir que en los mantenimientos de Remica se tiene muy interiorizada, por eso damos un servicio 24 horas todos los días del año. Del mismo modo, todas las personas del equipo tienen la misma orientación”.
El cliente interno
Desde Remica somos conscientes de la enorme importancia que tiene prestar el mejor servicio a nuestros clientes, sin embargo, también sabemos que para ello es necesario que exista una excelente relación entre los empleados que conforman la compañía.
Por ello, con el objetivo de mejorar como empresa y facilitar las relaciones que se establecen entre las diferentes secciones, Remica realiza anualmente encuestas de satisfacción a los trabajadores en las que se les pide que evalúen el funcionamiento, accesibilidad, agilidad… de aquellos departamentos con los que interactúan habitualmente.
El trabajo de Chus implica relacionarse con todos los departamentos de la compañía.
Una de las personas que mayor relación tiene con toda la compañía es Mª Jesus M., técnico del Departamento Financiero de la empresa. “Desempeño labores de administración, fundamentalmente relacionadas con la contabilidad. Lo que más me gusta de mi puesto es que implica tener relación con prácticamente toda la plantilla, lo que me permite estar en contacto y conocer a todo el mundo, independientemente de su departamento”, señala.
La joven, que lleva siete años en la empresa, asegura sorprenderse de la magnitud que ha alcanzado: “Los que llevamos muchos años aquí quizás no somos del todo conscientes de las dimensiones que ésta ha adquirido, lo mucho que hemos crecido. Es una satisfacción y te hace estar más a gusto con tu trabajo”.
Otra de los nombres que más se escuchan cuando uno pasa por las distintas áreas de las oficinas de Remica es el de Jesús S., técnico del Departamento de Informática de Remica. Él es el compañero que se encarga tanto de que todos los equipos funcionen correctamente como de coordinar aquellos proyectos destinados a mejorar la infraestructura de tecnologías de información de la compañía.
“El fruto de la buena calidad de los servicios que ofrece la compañía reside en un excelente trato con el cliente, tanto interno como externo. El poder satisfacer las necesidades del cliente en un tiempo óptimo y con un resultado eficaz es el principal objetivo del Departamento de Informática. Creemos prioritario poder dar soporte a nuestro cliente interno 24 horas, 7 días a la semana, sin ningún tipo de inconveniente”, asegura. “Para mí Remica significa, tanto crecimiento profesional, como sentimiento de equipo y buenos momentos. Es un placer trabajar aquí”.
Si a ti también te gustaría formar parte del equipo de Remica, puedes enviar tu currículum a través del apartado “trabaja con nosotros” de nuestra web. ¡Te esperamos!