¿Qué recomendaciones y consejos para ahorrar energía pueden adoptar los hoteles? ¿Qué ventajas tiene para los establecimientos hoteleros apostar por la eficiencia energética?
En la actualidad, el sector hotelero se encuentra ante unos clientes que prefieren entornos naturales y que, además, tienen muy en cuenta cómo se ha realizado la explotación del entorno y sus costes energéticos.
Una gestión energética eficaz del hotel contribuye a la conservación del entorno natural, lo que aumenta el confort de los clientes, y también mejora su imagen, distinguiéndolo como un establecimiento socialmente responsable frente a sus competidores.
Pero además, también mejora la cuenta de resultados del establecimiento: se calcula que los costes operativos de energía y agua suponen 9% de los gastos de suministros y el 3% de los ingresos totales del hotel. Reducir costes es posible si se aplican las medidas de eficiencia energética adecuadas.
¿Qué consejos para ahorrar energía deben tener en cuenta los hoteles?
Cuando se trata de un hotel de nueva construcción, uno de los consejos para ahorrar fundamentales a tener en cuenta es que hay que considerar los aspectos que podrían ayudar a que el consumo energético de la futura construcción sea menor. Por ejemplo, cuál es la mejor orientación, qué materiales y tipo de aislamiento se utilizará, si existen edificios y zonas ajardinadas alrededor, etc.
En establecimientos ya construidos, antes de realizar cualquier tipo de actuación de eficiencia energética conviene realizar un estudio detallado de cuáles son los puntos de mejora.
El éxito de un proyecto de eficiencia energética depende del logro de los ahorros que se establecen en la fase del diseño por parte de la empresa de servicios energéticos que lo ha realizado. Por tanto, una parte fundamental es que, tras poner en marcha las medidas, se midan los resultados, para saber si son los esperados o si se necesitan aplicar otras medidas para lograrlos.
Otros consejos para ahorrar energía en hoteles son:
A) PARA REDUCIR LA DEMANDA ENERGÉTICA….
- Buscar la implicación de todos. Concienciar a la plantilla y a los clientes de la necesidad de que adopten hábitos que favorezcan el ahorro energético (ej. No dejar las luces encendidas si una habitación está vacía, no echar las toallas a lavar si no están sucias, no derrochar agua caliente, etc.).
- Instalar sistemas de gestión de la energía para los equipos del edificio (BMS)
- Utilizar sistemas de control de presencia en iluminación, que apaguen automáticamente las luces cuando no haya nadie y las enciendan cuando detecten movimiento.
- Instalar lámparas y bombillas de bajo consumo energético. Proporcionan la luz necesaria pero consumen menos energía.
- Cuando lleguen al final de su vida útil, instalar electrodomésticos de gran eficiencia energética. Los ahorros energéticos que proporcionan terminan compensando la inversión realizada.
- Mejorar el aislamiento térmico de las instalaciones de climatización, incluyendo la red de tuberías.
- Mejorar el aislamiento térmico de muros, paredes y ventanas para evitar que se filtre el frío o el calor.
- Beneficiarse en la medida de lo posible de la ventilación natural, que no requiere un consumo energético.
- En las habitaciones y salas comunes utilizar terminales de climatización eficiente, que ofrezcan confort con un mínimo consumo energético.
B) PARA MEJORAR LA EFICIENCIA EN EL SUMINISTRO ENERGÉTICO
- Instalar calderas de alta eficiencia energética, como por ejemplo las calderas de condensación. Además, es mejor elegir aquellos equipos basados en combustibles energéticamente más eficientes, como por ejemplo el gas natural.
- Beneficiarse de tecnologías como la cogeneración (procedimiento mediante el cual se obtiene simultáneamente energía eléctrica y energía térmica útil) y la trigeneración (procedimiento similar a la cogeneración en el que se consigue frío, además de energía eléctrica y calor, típicos de la cogeneración, todo a partir de un mismo combustible o una misma fuente de energía primaria).
- Instalar en la medida de lo posible sistemas basados en energías renovables, como por ejemplo:
- Energía solar térmica para generar agua caliente sanitaria (ACS) y climatización, y/o calentar el agua de las piscinas.
- Utilizar otras energías renovables como la solar fotovoltaica para producir electricidad, la minieólica, la biomasa….
¿Quieres conocer más consejos para ahorrar energía en hoteles? Te recomendamos el Decálogo del Hotel Eficiente editado por el Instituto Tecnológico Hotelero.
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