La evolución de las empresas de servicios energéticos, en muchos casos, ha generado que empresas dedicadas al mantenimiento ‘tradicional’ de las instalaciones consumidoras de energía (calefacción, climatización, iluminación…) hayan tenido que adaptarse y dar un gran salto para ofrecer servicios energéticos.
Se trata de un proceso titánico, que afecta a todas las áreas de la organización, de la que no todas las compañías han sabido salir airosas. “Los primeros años de irrupción de este mercado en Alemania alrededor de 4.000 compañías se presentaron como empresas de servicios energéticos (ESEs). Un par de años después de ese boom, apenas quedaron 200”, explica Carlos Braojos, director de Producción de Remica.
Son muchos fenómenos los que explican estas cifras, pero, indudablemente, hay uno que no se puede obviar y es que la evolución de las empresas de servicios energéticos debe contar con una adecuada visión estratégica y liderazgo que permita a la organización a adaptarse a este cambio de actividad.
¿Cómo surgen las ESEs?
Para entender la evolución de las empresas de servicios energéticos (ESEs) es necesario, en primer lugar, reflexionar sobre cuál ha sido la evolución en el consumo de energía durante los últimos años.
Durante gran parte del siglo XX, la eficiencia energética no fue una prioridad: la energía era más barata y el hecho de que se produjeran ineficiencias no suponía un problema. Sin embargo, el constante encarecimiento de las energías fósiles y el aumento de emisiones de gases de efecto invernadero, han hecho que Europa – con una dependencia energética del exterior del 53,4%, según Eurostat – haya tomado conciencia de la necesidad de mejorar en eficiencia energética y de aumentar la implantación de energías renovables.
Es en este contexto en el que se impulsa el nacimiento de las empresas de servicios energéticos, que según se define en la Directiva 2006/32/CE, proporcionan “servicios energéticos o de mejora de la eficiencia energética en las instalaciones o locales de un usuario”.
Claves de la evolución de las empresas de servicios energéticos
En el año 2008 Remica dio el salto de manera pionera en nuestro país al convertirse en empresa de servicios energéticos. Fue una decisión estratégica dentro de la compañía que afectó a todas las áreas de la organización.
Cualquier empresa mantenedora que desee evolucionar para convertirse en empresa de servicios energéticos debe asumir las nuevas competencias reflejadas en la Directiva 2006/32/CE. Y es que, además de labores de mantenimiento, las ESEs proporcionan ‘servicios energéticos’ por lo que “asumen cierto grado de riesgo técnico y económico, ya que el pago de estos servicios se basará (total o parcialmente) en el cumplimiento de los ahorros energéticos en los términos pactados con el cliente a través de la implantación de Medidas de Ahorro Energético (MAEs) y su posterior gestión y seguimiento”, recuerda Carlos Braojos.
Gestión por valores
Las empresas de servicios energéticos persiguen un fin social importante, que es mejorar la sostenibilidad de las instalaciones y terminar con el derroche energético, siempre garantizando la seguridad de las instalaciones y el confort de los usuarios. Se trata por tanto de compañías propensas a la gestión por valores.
En el caso de Remica Servicios Energéticos, la orientación al cliente, la integridad, la transparencia, el rigor y el afán de superación, son nuestros valores y, por tanto, nuestro compromiso más importante estos son nuestros ideales y valores corporativos:
- La Misión y Visión de nuestra compañía se centra en contribuir al desarrollo sostenible de la sociedad y lograr disminuir el consumo de energía mediante la optimización de las instalaciones, con los beneficios que ello conlleva para el medio ambiente. El Desarrollo Sostenible, la Integridad y la Transparencia, son algunos de los valores que guían nuestra filosofía.
- Coherencia: ‘predicar’ con el ejemplo. Para impulsar el ahorro y la eficiencia energética en nuestro entorno, debemos ser un ejemplo de ello. Por ello, en nuestras instalaciones de han llevado a cabo diversas medidas para reducir el consumo energético, además, se ha implicado a todo el personal en el cambio de hábitos de consumo y estamos sustituyendo nuestra flota de vehículos por vehículos eléctricos.
- Apostamos por las personas: El principal valor de Grupo Remica es su equipo profesional. Por ello, apostamos por impulsar su desarrollo mediante un programa continuo de formación, además de favorecer la integración y la conciliación de la vida laboral y personal.
- Impulsamos la Innovación y el Desarrollo dentro de nuestra organización. Grupo Remica es la compañía del sector con mayor inversión en I+D+i, una apuesta firme por las nuevas tecnologías, la profesionalidad y el talento.
- Más concienciación para preservar el medio ambiente. Más allá de las repercusiones positivas que la actividad de la empresa tiene en nuestro entorno, desde Grupo Remica tratamos de concienciar a la sociedad de los retos a los que el planeta se enfrenta. A través de nuestros canales en redes sociales, mostramos como pequeños cambios en nuestros hábitos de consumo tienen un gran impacto en materia medioambiental. El reto del cambio climático y el logro de una economía más sostenible depende de todos.