Mejorar la eficiencia energética es clave para conseguir un ahorro en la factura de los hogares y conseguir el máximo confort. Las nuevas construcciones edifican de una manera más eficiente, pero es necesaria la mejora de las edificaciones ya construidas.
Una de las soluciones es la rehabilitación, pero también existen medidas sencillas que pueden suponer un ahorro. A continuación señalamos seis claves para tener en cuenta a la hora de mejorar la eficiencia energética:
Orientación
La eficiencia energética depende de la ubicación geográfica y la orientación de la vivienda. Si estás pensando en comprar o alquilar una vivienda situada en Andalucía, tendrá más ventajas si está orientada al norte, ya que no tendrá que gastar tanto en aire acondicionado. Sin embargo, en Madrid es mejor la situación al sur, permitiendo una mayor entrada de rayos solares en invierno, ahorrando en calefacción.
Cuando nos encontramos en una vivienda, pequeños gestos como subir las persianas en invierno cuando está dando el sol, o bajar los toldos en verano, son capaces de cambiar en uno o dos grados la temperatura. Se estima que la correcta utilización de estos elementos permite la reducción de entre el 30% y el 50% del consumo eléctrico en la climatización de las estancias, según el estudio realizado por el Centro de Fomento de la Investigación Sostenible de la Universidad de Minnesota.
Exteriores
Gestos sencillos como plantar árboles o arbustos para dar sombra durante el verano es uno de los elementos que mejoran la eficiencia energética. La vegetación impide la radiación excesiva hasta la segunda altura de un edificio.
Agua
La cantidad de agua que consume cada español se sitúa en torno a los 166 litros de agua al día, entre usos domésticos y municipales. Para favorecer el ahorro se puede optar por instalar reductores de caudal en el grifo o en la ducha, ya que permiten ahorrar entre un 18% y un 47% de agua.
Aislamiento
Según la ‘Guía práctica de la energía para la rehabilitación de edificios. El aislamiento, la mejor solución’, para cualquier edificio de más de 20 años o insuficientemente aislado, se estima aconsejable una rehabilitación térmica con la que podría alcanzarse, fácilmente, un ahorro del 50% de la energía consumida en calefacción y/o refrigeración.
Es una de las acciones que mejor se amortizan, una rehabilitación térmica media, considerando el coste total de la obra y del aislamiento se puede amortizar en 5-7 años. Considerando la larga vida media del aislamiento, se podrá ahorra en ese período de 8 a 9 veces más de lo que costó toda la rehabilitación.
Cuando la comunidad de vecinos no se puede poner de acuerdo para llevar a cabo una rehabilitación en el edificio, se pueden hacer pequeñas mejoras dentro de casa que ayudan al aislamiento. El cambio de ventanas, por ejemplo, por otras con vidrios dobles con cámara intermedia, puede suponer un ahorro del 50%.
Iluminación
Según la directiva Ecodesign 2009/125/CE se fijó la eliminación de las bombillas incandescentes, no eficientes de manera progresiva entre 2009 y 2016. Se consideran poco eficientes porque el 90% de la electricidad que consume se transforma en calor y sólo el 10% se transforma en energía lumínica.
El objetivo de la Unión Europea es lograr, en 2020, un ahorro de electricidad equivalente al consumo anual de once millones de hogares y una reducción media del recibo de la luz 25 euros al año con la aplicación de las nuevas normas de eficiencia energética.
Para sustituir a las bombillas incandescente existe la iluminación LED, que consumen entre el 80% y 90% menos de electricidad y su vida útil se encuentra en 45.000 horas. Otra de las ventajas que supone es su posibilidad de reciclaje al no tener elementos contaminantes para el medio ambiente.
Calefacción
En invierno el uso de la calefacción es prácticamente diario y contar con una instalación eficiente permite evitar fugas de energía y reducir el coste de la factura. Actualmente las calderas de condensación son consideras en el mercado como uno de los modelos más eficientes gracias al ahorro que suponen. Su rendimiento se encuentra en torno al 109% frente al 80% de las calderas estándar o el 96% de las calderas de baja temperatura.
Es importante determinar con la comunidad de propietarios qué equipo instalar para conseguir el máximo rendimiento y que todas las viviendas consigan el máximo confort.
Grupo Remica es una líder en servicios energéticos, con el objetivo de reducir el consumo de energía y la disminución de emisiones de gases contaminantes, para lograr un entorno de vida más saludable para todos.